“Plastikseele”, se llama la obra que fuí a ver el 29 de junio, dentro del Festival Internacional de Danza Contemporánea IMPULSOS 2011 que se leva a cabo en bogotá.
Esta obra Alemana/Venezolana dirigida por el coreografo Samir Akika, da inicio mediante una presentación de una de sus multiples bailarinas, la cual expresa sus sentimientos al estar en el escenario frente al público colombiano.
Inmediatamente al empezar un jóven bastante talentoso a bailar hip hop, se empiezan a dar una serie de intervenciones visuales, musicales, como por ejemplo la de un video el cual empieza a narrar la situación de la cultura venezolana, orientado a la artificialidad de las mujeres en ese país.
La escenografía esta insiprada en lo urbano, por lo tanto se pueden observar grafities, que son descubieros paulatinamente miestras la obra trasnscurre.
También hay una valla de publicidad que llama la atencíon, en donde se proyecta el video que antes les conte.
Se puede decir que durante todo el montaje, se combinan talentos de danza y de teatro en donde el único objetivo es evidenciar el comportamiento tan artificial que tienen las mujeres frente a su aspecto físico.
Se realizan muchas parodias, la principal diría yo, ante los concursos de belleza, en donde 4 diferentes mujeres se pelean el título por ser la más bella, o más bien la mas estúpida, ya que las respuestas que dan después de las preguntas reales son bastantes pobres y carentes de toda profundidad intelectual.
En el escenario, los artistas se burlan también de las obseciones físicas femeninas, como por ejemplo la supesta importancia de tener senos protuberantes y una cola enorme y levantada, de tener un cuerpo armonioso, y movimientos femeninos agradables a la vista de la sociedad.
En el escenario, los artistas se burlan también de las obseciones físicas femeninas, como por ejemplo la supesta importancia de tener senos protuberantes y una cola enorme y levantada, de tener un cuerpo armonioso, y movimientos femeninos agradables a la vista de la sociedad.
Yo considero que la obra es una parodía graciosa, en la que se logra trasmitir el mensaje de que los elementos plásticos, y las creencias que nos impone la sociedad frente a la verdadera belleza, nos opacan y nos hacen esclavos de patrones a seguir que no nos definen y no nos hacen sentir verdaderamente felices.
Por otro lado, considero que los moviemientos realizados por los bailarines masculinos de hip hop, son los mas pasionales que se pueden evidenciar en esta puesta en escena, movimientos definidos que me sorpredieron por la rigurozidad de su realización y por la dificultad de éstos.
Personalmente considero que las mujeres se destacaron más en el ámbito teatral, ya que con sus intervenciones lograban hacer reír a la gente y ponernos a pensar sobre lo estúpido que uno se puede ver al adoptar comportamientos materiales parecidos.
La actuacíon de la mujer más voluptuosa, la cual se puede decir que es la que más se encarga de hacer reir y pensar al público, me parecío muy buena, ya que evidentemente logró sumergirse muy bien dentro de su personaje, adoptando movimientos toscos, tonos de voz fuertes que lograban trasmitir emociones al público, descrestando a la audiencia sobre todo al final en donde se despoja completamente de su ropa y manifiesta sentirse libre de toda atadura Plastica.
Por: Lina Quintero
